Introducción
Supongamos que tenemos organizada nuestra
biblioteca escolar: los fondos correctamente catalogados y clasificados, los
aspectos materiales (espacios, luces, mobiliario, decoración…) cuidados al
detalle, el personal especializado al pie del cañón… Ahora viene la fase
auténticamente importante, frenéticamente compleja y efervescentemente
motivadora: la dinamización de los recursos y materiales.
Lo que proponemos a continuación es la primera parte de un infinito abanico de posibilidades didácticas que sólo pretende abrir ante el lector un horizonte apasionante de experimentos, de descubrimientos, de éxitos y fracasos. Escoja él lo que más le interese, lo que más le motive y, sobre todo, lo que más se adecue a la realidad escolar en la que desempeña su labor y a los estudiantes que comparten con él la deslumbrante labor de enseñar y aprender.
Las fuentes de estas estrategias son diversas: muchas son de cosecha propia, pero otras han sido aprendidas de la mano de Mariano Coronas y su equipo del Seminario de Biblioteca del C.P. Miguel Servet de Fraga (Huesca) y de Pepe García Guerrero y sus colaboradores del Proyecto Don Quijote en Teba (Málaga).
Lo que proponemos a continuación es la primera parte de un infinito abanico de posibilidades didácticas que sólo pretende abrir ante el lector un horizonte apasionante de experimentos, de descubrimientos, de éxitos y fracasos. Escoja él lo que más le interese, lo que más le motive y, sobre todo, lo que más se adecue a la realidad escolar en la que desempeña su labor y a los estudiantes que comparten con él la deslumbrante labor de enseñar y aprender.
Las fuentes de estas estrategias son diversas: muchas son de cosecha propia, pero otras han sido aprendidas de la mano de Mariano Coronas y su equipo del Seminario de Biblioteca del C.P. Miguel Servet de Fraga (Huesca) y de Pepe García Guerrero y sus colaboradores del Proyecto Don Quijote en Teba (Málaga).
Visitas guiadas
Asistirán clases enteras para
familiarizarse con la ubicación de los fondos y favorecer así la autonomía de
cada usuario. Se aprovechará para contar un cuento, presentar montajes de
diapositivas, realizar juegos de simulación de cómo hacer un préstamo, manejar
ficheros, acceder a los OPACS...
Boletín informativo
De
periodicidad bimestral, son óptimos para recordar periódicamente la existencia
de la biblioteca y que está a disposición de todos. Ofrecerá información de las
actividades, novedades, noticias culturales, literarias...
Expositores
Temáticos,
de novedades, de prensa... Su finalidad será crear en la sala de lectura
rincones de sorpresa o lugares que, por ser frecuentemente renovados en su
aspecto y contenidos, estimulan la curiosidad de los lectores. Ofrecen muchas
posibilidades: hacer pequeñas exposiciones de libros de un autor, con motivo de
un acontecimiento, de un centenario, de una noticia...
Seminario Permanente
Constituir un Seminario Permanente de
maestros, bibliotecarios y padres y madres interesados en la lectura, la escritura
y el funcionamiento de la biblioteca permitirá enriquecer el Plan Anual y
asegurar, de esta manera, una mayor participación. Así será más fácil
"vender" las actividades que se organicen. Este grupo deberá trabajar
con un Plan Anual bien planteado y realista y se reunirá con frecuencia
quincenal para preparar y llevar adelante los planteamientos asumidos.
Carteleras informativas
Ubicados en lugares visibles y de paso,
ofrecerán informaciones culturales y literarias (la prensa es muy útil en este
aspecto) para facilitar su posible aprovechamiento en las aulas. Conviene
renovar con frecuencia las informaciones y utilizar técnicas llamativas para
captar la atención: recortes, titulares, colores...
Buena información
Dinamizar el marketing de cada sección de
la biblioteca para facilitar la utilización y la búsqueda de los distintos
documentos. El etiquetado será bien visible, cada sección estará rotulada,
habrá ficheros ordenados por títulos, autores, temas...
Involucrar a los niños
No
sólo en la decoración sino también en el funcionamiento de la biblioteca. De
este modo estaremos ofreciéndoles un canal de participación en el centro y
fomentando su responsabilidad. Las funciones (facilitar el préstamo, realizar
tareas de registro, fichado, tejuelado... de los documentos, orientar a los
lectores, facilitar la búsqueda de información, colaborar en el montaje de
actividades, etc.) serán rotatorias, ya que normalmente se apunta
voluntariamente un importante número de chicos y chicas para ejercer de
bibliotecarios. Será precisa una pequeña formación de estos voluntarios para
que optimicen su cometido.
Crear material atractivo
Se
confeccionarán materiales atractivos relacionados con las actividades
organizadas desde la biblioteca (carnés de lector, separadores, pegatinas,
mascotas, pins…) que puedan repartirse a todos los niños del
centro. Servirán de recuerdo y valoración de la biblioteca.
Materiales para maestros
El
modo ideal de lograr su implicación en el funcionamiento de la biblioteca es
aprovechar al máximo las posibilidades que este centro de recursos ofrece. Para
ello elaboraremos carpetas temáticas para el profesorado: estrategias de manejo
de la información, técnicas de trabajo intelectual, procedimientos de
utilización de las obras de referencia, relación de libros para tratar
determinado tema, recopilación de poesías referentes a una estación, un autor,
etc., dossiers, guías de lectura, materiales para motivar una actividad,
información de novedades, estrategias de animación lectora... Si estos materiales
se le facilitan al maestro antes de que los necesite estaremos haciendo un
favor impresionante a los estudiantes porque la didáctica que derrame el
docente sobre ellos será más motivadora y rica. Para ello es preciso que el
bibliotecario esté plenamente integrado en el claustro de profesores, con
capacidad decisoria y plena y constante relación con cada equipo de maestros.
Actividades colegiales
Organizar desde la biblioteca al menos una
actividad trimestral en la que participe todo el centro convertirá a la
biblioteca en el foco cultural dinámico y creativo de la escuela. Pueden ser
actividades como: «Semana del cómic», «Semana de la prensa», «Taller de
poesía», «Un libro, un viaje», «Mercadillo de libros», etcétera.
Otras actividades de interés
• Resulta
imprescindible que al menos una vez a la semana cada clase acuda a la
biblioteca a leer, consultar, estudiar...
• Si hay biblioteca
municipal, hay que establecer estrechos lazos con ella: actividades
culturales y de animación conjuntas, préstamos, intercambios...
• Concienciar a todo
el claustro de que la biblioteca no es algo vinculado sólo con el área de
lengua. Son muchas las actividades escolares que admiten ampliación de datos,
dos versiones distintas para ser contrastadas, etc. Y todo ello puede
resolverse en la biblioteca.
• Taller de
creación literaria: en la medida en que los niños (y los maestros, por qué
no) se sientan valorados y perciban que sus ideas y producciones son apreciadas
por los demás, estarán más predispuestos a leer los trabajos de los otros, sean
estos sus iguales o, más tarde, autores de prestigio.
• Exposiciones didácticas,
monográficas, de novedades...
• Encuentros con
escritores, ilustradores, editores... que habrán de estar planificados con
precisión milimétrica para evitar que se conviertan en una actividad
desmotivadora y en absoluto relacionada con la lectura.
• Concursos de
cuentos, adivinanzas, poesías, dibujos…: permitirán, como decíamos antes, que
los niños se sientan valorados y capaces de crear.
• Creación
colectiva de libros gigantes, documentales, de recetas, de pócimas y
conjuros, de poemas, de nanas, de anécdotas, de cuentos tradicionales recopilados
por los propios chicos y maestros...
• Taller
informático: incorporar el libro electrónico y las enciclopedias en
cd-rom a los materiales y recursos de aprendizaje para que el niño supere el
conflicto tradicional que padres y maestros le planteamos entre lectura y
tecnologías avanzadas.
• La hora del cuento:
institucionalizar y planificar temporalmente ratos específicos para que la
comunidad educativa pueda asistir a narración de cuentos.
• Libroforum:
huyendo de la escolarización del libro y subrayando el valor socializante de la
lectura compartida.
• Taller editorial:
creación de periódicos, revistas, boletines...
• Creación de montajes
audiovisuales a partir de libros: diseño de diapositivas, grabación
del texto en casete con apoyo de efectos sonoros y especiales.
• Dramatizaciones basadas
en libros de la biblioteca.
• Maratón de recitado de poemas.
Te digo lo mismo que en la entrada anterior.
ResponderEliminarTe anoto esta también.